Para
nuestra segunda excursión inmobiliaria nos decidimos por el chico estrella. Un
ejemplar estresante donde los haya debido básicamente a mi teoría que se tomaba
un redbull por minuto.
Nos prometió
el paraíso, parecía entender nuestras demandas, pero de pronto…
Yo-
Esto es…Residencial.
–
Bueno, dijimos que queríamos algo tranquilo – Novio tan inocente como siempre.
Yo – ¡Dios
mío!, un colegio…
-Pues
es la casa de al lado. Pared con patio… - Ahora novio, empieza a preocuparse
tanto como yo.
- No
quiero vivir aquí T_T
– Vamos
a ver la casa por dentro, por no hacerle un feo al chaval. – Novio siempre tan
educado.
Yo -Madre
mía, si hasta se le ha caído el número, y la puerta… ¿Eso es el jardín o un
bosque-estercolero? – Ánimos decayendo...
-A lo
mejor es una de esas que están arregladas por dentro – Novio siempre tan
positivo
Entramos
chico
estrella -Como podéis ver la casa es
amplia, con mucho espacio para guardar cosas. No hay lavadora, pero supongo que
no pondrán problema.
Novio-
La moqueta tiene más años que mi güela
Novio –
Aquí fijo que hasta hay poltergeist
Yo – Aquí
no me dejas sola, ni de coña.
Yo – La
casa de la matanza de Texas estaba mejor conservada
…
chico
estrella - Bueno, ¿Qué os parece?
A coro
y al unísono, cual almas en pena pidiendo redención:
noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
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