Como adicta a la moda y gastiza profesional todos los meses llega a mi buzón la Glamour y la leo tal como los religiosos leen su Biblia, Corán…Ya he comentado millones de veces que todo lo que hay en ella va a misa. Pero este mes me llamo especialmente la atención un artículo sobre el arte de ligar. Dado que ayer mantuve una conversación muy interesante durante un lunch de chicas sobre como “play cool” establece la diferencia entre estar soltera y tener a tu alma gemela al lado.
La primera regla básica es bien conocida: No llamar, no parecer interesada. Luego empiezan las diferentes cosas que cada una tenemos consecuencia de nuestro “luggage”. La experiencia nos hace más sabias, ¿o más desconfiadas?
Algunas expuestas no me hicieron más que reír y sospechar que nos volvemos criaturas complejas con el paso de los años. El hecho de alisarme el pelo para mi es más una cuestión de tener tiempo que de querer impresionar. De hecho si por mi fuera llevaría siempre el pelo planchado, tacones e iría supermona. Pero que quieres si afuera nieva y voy a trabajar doce horas lo último que quiero para volver es pelearme con unos tacones de infarto…
Mi abuela me decía que un hombre que no te mira a los ojos y que besa con ellos abiertos miente...quien sabe si tiene razón pero yo conozco muchos mentirosos que controlan esa técnica.
De todo lo más interesante que se extrae es que como dice el chojín: no no sin condón…
Nos vemos