viernes, 2 de octubre de 2009


La violencia engendra violencia, el odio solo genera odio. La vendetta es una sucia palabra cuando toma vidas humanas. ¿qué impulsa a alguien a convertirse en juez y verdugo? ¿Quien da el derecho a alguien a ejecutar su más intimo deseo?¿y qué puede ser lo que genere ese deseo? No alcanzo a comprender la facilidad con que una persona toma la vida de otra para que minutos más tarde sea también la suya tomada en nombre de nuestra amiga vengaza. La rabia generada por la pérdida oscurece los más claros corazones, y cuando no es tan claro el corazón produce una reacción de iguales proporciones que generará idéntica sensación de pérdida en un corazón ajeno. Son reacciones en cadena que si en un momento dado no se detienen pueden llevar a la extinción de una especie. Quizá sea este el principio probado de la fórmula: guerra.
La guerra se reduce a odio.
Por lo tanto ¿es el odio la pandemia de nuestra sociedad?

odio, rabia, violencia, dolor, muerte y desolación

cuando nadie comprenda el significado de estas palabras la guerra dejará de existir.

Requiem por todos aquellos que mueren en las calles, porque no hay nadie con derecho a quitar la vida de otro por muy grave que haya sido su pecado.

La justicia no debería estar en las calles.

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