miércoles, 17 de noviembre de 2010


Cerrado por nocturnidad. Resulta que el trabajar de noche dejará momentos míticos en mi vida. Cuando hace dos años fui a un curso sobre higiene del sueño me contaron que trabajar de noche acorta la vida y provoca trastornos. Un día que nos aburríamos le hicimos un electro a un compañero después de trabajar la noche y era anormal (este chico en cuestión juro y perjuro que no tenia ninguna cardiopatía) El caso es que nosotros somos las hadas que velamos por vuestros seres queridos mientras vosotros dormís placidamente.
Eso si, a las hadas también se nos va la olla. Como resultado de una maratoniana 9 noches seguidas descubrí que puede llevarte mucho tiempo reordenar tu patrón de sueño y acabas muy jodido. Pero, ¡eh! conoce tus límites ^_^
Esta vez es tan solo la tercer noche, pero la gente es incapaz de darse cuenta de que la noche te confunde. Y para permanecer despierto cantas gilipollezes o eres demasiado efusivo en tus saludos. Si, subir el tono de voz me mantiene despierta...Y por cierto menos mal que no entienden español, eso si se dan cuenta que canto como un gato en celo ¬¬_ Lo mejor, que cambiando de curro nadie se da cuenta que siempre cantas lo mismo ^_^
La parte buena es que perfeccionas el arte de dormir en el transporte público a la vuelta a casa, y cuando te pasas conoces nuevas zonas de tu ciudad...

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